Cena con los Clayton
Melisa POV
Hoy
era lunes y tenía que comprar unas cosas de la tienda de antigüedades del pueblo,
para la casa del viejo Waldorf, subí a mi coche y antes fui a ver a Eric, para
que me quitase por fin los puntos de la herida de bala, me parecía mentira que
ya hubiera pasado un mes y medio, desde que mis hermanos y yo llegamos a Coos
Bay y la verdad que las cosas han ido a mejor.
Así que el
Así que el
cambio
de aires y enterarnos de este lugar fue un regalo, aunque la verdad cuando
llegamos esto me pareció una broma, por eso no se todavía si todo esto es un
regalo o un castigo.
Después
de que Eric, me quitase los puntos fui a comprar lo que necesitaba y al primer
lugar que fui, fue a “Antigüedades Esme”.
-Buenos
días, ¿qué desea?
-Hola,
venía a comprar una lámpara de aceite y unos cuadros.
-Claro,
mire lo que quiera y cuando sepa lo que busca me avisa.
-Muchas
gracias, señora.
-No
me gusta que me llamen señora, me hace sentir como una anciana, llámame Esme
-Encantada
Esme, yo soy Mel
-Nunca
te he visto por aquí, tú eres la chica que vive en casa del viejo Waldorf?
-Sí
vivo ahí desde hace un mes y medio.
-Entonces
ya conoces a la gente del pueblo, ¿no?
-No,
he estado un poco liada y solo he ido a casa para comer y dormir, o si no me
voy a la playa con mis hermanos.
-Sabes
si tus hermanos no están ¿por qué no te vienes a mi casa a cenar?, mis hijos
están de viaje y solo estamos mi marido y yo, la verdad es que nos sentimos un
poco solos.
-No
me importaría, ¿dónde viven?
-Yo
voy a recogerte vale, ya que es difícil de llegar.
-Vale,
gracias.
-A
las ocho estaré allí sin falta.
La
tarde pasó volando y con eso dieron las ocho, en ese mismo instante un coche
pitó y cogiendo mis cosas salí de casa y monté en el coche de Esme-
-Hola
Mel, ¿qué tal la tarde?
-Bien,
he podido hacer todo lo que quería.
En
apenas cinco minutos llegamos a su casa, que más que casa, parecía una mansión.
-¿Te
gusta?
-Gustarme
es poco.
-La
diseñé yo, y mi hija me ayudo a decorarla.
-Tenéis
buen gusto, me gusta.
-Hola
cariño, ya he llegado
-Calvin,
estamos en el salón.
-Hola.
-Hola
amor, ella es Mel la vecina nueva.
-Hola
Mel, yo soy Calvin el médico del pueblo y el dueño.
-Encantada.
-Y
bien Mel, vives sola en casa del viejo Waldorf?
-Depende
del día habitualmente sí, cuando no estoy ahí, estoy en la playa con mis
hermanos.
-¿Tienes
hermanos?
-Sí
dos, John y Sam.
-¿Y
vuestros padres?
-Murieron
hace un tiempo.
-Valla
lo siento, ¿qué edad tenías cuando murieron?
-Yo
tenía 16 años y mis hermanos 13 y 9 años.
-Ha
tenido que ser muy duro tener que hacerte cargo de ellos siendo tan joven.
-Si
en un principio lo fue pero luego con el apoyo entre nosotros, seguimos hacia
delante.
-Y
se podría saber si no es mucho pedir, ¿de qué murieron tus padres?
-Íbamos
de viaje al campo cuando un oso se cruzó por la carretera, mi padre perdió el
control del coche y caímos por un precipicio, yo estuve en coma unos días y mis
padres murieron en el acto.
-Dios
mío-dijo escandalizada Esme-
-Calvin
entonces usted tiene como adjunto a Eric ¿no?
-Sí
Mel ¿lo conoces?
-Él
ha sido quien me ha curado está herida-dije enseñando la herida de bala ahora cicatrizada-
-Oh
Dios Santo, Mel ¿qué te pasó?
-Me
dispararon en mi trabajo nada importante bueno ya es tarde, ha sido un placer
cenar con vosotros, pero es hora de irme a casa
-El
placer ha sido nuestro Mel, ven cuando quieras vamos te llevo a casa.
-Gracias
hasta luego Esme.
-Adiós
hija.
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