Vuelta a casa, los nuevos vecinos
Zack POV
Nada
más bajar del avión, fui a recoger mi volvo para salir rumbo a Coos Bay, si me
daba prisa llegaría para las cinco de la tarde, a la hora que empezaba el partido
de béisbol.
Mientras
conducía hacia casa y escuchaba música de Black and White, pensé en la chica
del avión. Salí tan deprisa de él, que ni siquiera le pregunté su nombre, ni
ella preguntó el mío.
Zack
eres un tonto, con lo guapa que era esa chica y no tuviste ni valor de
preguntarle su nombre, al igual que pasó en la playa con la otra chica, ni si
quiera la miraste a la cara, seguro que pensaría
que
eras un engreído.
Tenía
tantas ganas de volver a verla, pero era algo imposible, no le pregunté ni dónde
se dirigía con sus hermanos, lo único que sé es que su hermano se llama John,
¿de qué me suena a mí ese nombre?
-!!John!!
¿Sería él, acaso esa chica que conocí, podía ser Melisa?
Imposible,
tiene que haber cientos de personas que se llamen John en el país, sería mucha
casualidad de que fuese él, pero por otro lado deseaba que fuera así porque
entonces esa chica sería Melisa-pensé-
Sin
darme cuenta ya había llegado a Coos Bay, para ser exactos estaba al lado del
hospital de mi padre, así que me acerqué a saludarle, antes de que empezase el
partido.
-Hola
señorita, ¿podría ver a mi padre?
-Claro,
voy a decírselo y te aviso.
-¿Doctor
Clayton? Su hijo Zack quiere verle, ¿puede pasar?
-Muy
bien doctor Clayton, se lo diré.
-Zack,
su padre lo espera en su despacho.
-Muchas
gracias, adiós.
En
menos de dos minutos, llegué al despacho de mi padre.
-¿Se
puede?
-Claro
Zack hijo pasa, me alegro de que hallas vuelto a casa.
-Yo
también me alegro de volver a casa.
-Y
bien, ¿cómo te lo has pasado en Los Ángeles?
-Muy
bien, la verdad es que me he relajado bastante y mañana si quieres, puedo venir
a ayudarte al hospital.
-No
creo que tu hermana y tu madre te dejen salir de casa hasta que no le cuentes
tu viaje con lujo de detalles.
-Cierto.
-Bueno
papá, me voy a casa pronto empezará el partido, ¿vienes?
-No
hijo ve tú yo salgo más tarde.
-Vale,
entonces nos vemos luego.
En
diez minutos llegué a casa y como imaginaba, mi hermana Lucy se abalanzó sobre
mí y empezó a preguntarme sobre mi viaje nada más entrar.
-Hey
Lucy, me dejas primero entrar y después te contesto, hola mamá.
-Hola
hijo, me alegro que estés aquí ya.
-Yo
también me alegro de volver a casa
-Hey
Zack, entra rápido que en quince minutos empieza el partido.
-Y
Janick, ¿no viene a ver el partido?
-Sí,
pero ha ido con Rachel a comprar unas cosas para mañana la fiesta en la playa.
-Valla
Lucy, ¿te has peleado con Rachel? Porque tú siempre estás dispuesta para las
compras.
-Cuando
han ido yo no estaba.
-Ok,
pues os dejo me voy a dar una ducha y ahora bajo.
Subí
a mi habitación, cogí ropa limpia y entré a la ducha.
-Melisa,
¿dónde estás? ¿Cómo te va?-dije en un suspiro mientras el agua caliente bajaba
por mi cuerpo-te extraño tanto
-Hey
Zack, me alegro de que hallas vuelto.
-Yo
también me alegro de haber venido, ahora salgo.
-¿Otra
vez estabas pensando en ella?
-¿De
qué hablas?
-Ya
sabes de quien hablo de tu primer amor Melisa.
-Sí-dije
mientras me ponía la camiseta-
-Zack
de verdad estás mal, erais unos críos.
-Lo
sé, pero la amo y me gustaría encontrarla, saber de ella.
-Búscala.
-¿Y
por qué crees que me fui a Los Ángeles en un principio? Lo que pasa que ya
sabes cómo es Emer, se apunta a todo y por eso no pude averiguar nada pero voy
a volver para buscarles.
-Lo
siento Zack no lo sabía, si lo hubiera sabido no me hubiera dejado convencer
por Emer.
-No
importa, vamos que ya habrá empezado el partido.
La
tarde pasó sin ningún incidente viendo el partido, en el que nuestro favorito ganó
por cinco puntos, como se hizo tarde Janick y Rachel, se quedaron a dormir en
casa, ya que ellos cuando cumplieron los 18 decidieron irse a vivir a la casa
de sus padres, porque les pillaba cerca de la universidad de Oregón, pero desde
hace más de tres años pasaban la mayor parte del tiempo aquí, ya que
Janick empezó a salir con mi hermana Lucy y Rachel extrañaba a Emer con el que
salía desde los 13 años.
Cerca
de las 10:30 de la noche llegó nuestro padre del hospital.
-Buenas
noches familia.
-Buenas
papá.
-¿Cómo
te ha ido el día cariño?
-Muy
bien Esme he tardado un poco más porque me he encontrado con los nuevos vecinos
de Coos Bay.
-¿Qué?,
¿nuevos vecinos?
-Sí
-Por
favor dime que son chicas
-Lo
siento hija, yo al que vi fue a un chico, los otros dos estaban dentro del coche,
aunque creo recordar que la que conducía era una mujer, no estoy seguro.
-Jo
ojalá que sea una chica la que conducía, así le podré asesorar en la ropa y llevarla
de compras.
-Dios
mío pobre si de verdad es una chica.
-Hija
si fuese una chica por favor no la asustes con tus compras o se marchará de
aquí como tu vieja amiga Thalía.
-Esa
arpía no era mi amiga y mucho menos mi mejor amiga mi única y mejor amiga fue
Melisa y me separasteis de ella, ojalá la encuentre pronto.
-Lucy
ya te dijimos que no nos quedaba de otra mis mejores amigos murieron y sus
hijos eran menores de edad y teníamos que quedarnos con ellos o los llevarían a
un orfanato, además has salido ganando porque sales con su hijo y tu hermano
con su hija, así que seguro que están muy felices y orgullosos de ellos y yo
también extraño a mi viejo amigo Charles.
-¿Y
por qué no vamos y lo buscamos papá?
-Lucy,
no sabemos ni siquiera, si ellos siguen viviendo en Los Ángeles, tal vez no
vivan ni en el país.
-Pues
pregunta a algún amigo que tengáis en común, para saber de él.
-Lo
intentaré, pero no prometo nada Lucy.
-Estoy
segura de que los encontraremos.
-Bueno
si me disculpáis, yo me voy a la cama que estoy agotado buenas noches.
-Que
descanses hijo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario