Pesadilla (Diciembre)
Desde el fin
de las vacaciones a Punta Cana ya han pasado cuatro meses, Tayler y yo
seguíamos juntos pero solo como amigos con derechos, Jared y Alison habían
decidido ya el día de su boda que sería unos meses después de nacer nuestro
sobrino Matt , mi hermano Derek y Ruth no dejan de comprar cosas para el bebé,
mi padre y Sue nos sorprendieron un mes después de su boda de que íbamos a
tener un hermano o hermana dentro de unos seis meses o así, Brian gracias a
Dios no me ha vuelto a molestar algo raro pero que me agradaba a la misma vez,
por desgracia se había mudado de forma permanente a Miami junto con William y
Esme sus padres.
Por mi parte
ahora tenía más trabajo que nunca en el bufet y trabajo atrasado en la radio
después del éxito en nuestro programa que había pasado de hablar de posturas
del kamasutra a hablar de cómo conquistar a una mujer mediante el sexo.
También
tengo que decir que desde hace una semana tengo un admirador secreto que me
manda mis flores favoritas y me ha pedido salir a cenar con él ya varias veces,
a lo que yo me he negado, nadie podía saber mi identidad.
Hoy como
cada día había quedado con Tayler para comer algo en su piso, llevaba ya tiempo
con querer tener sexo conmigo, pero yo no me sentía preparada y esperaba
respetase mi decisión.
La noche
terminó mal ya que Tayler intentó pasarse conmigo y gracias a su despiste salí
de su piso, sino no imaginaba que hubiera pasado en su casa.
Nada más
llegar a casa me di una ducha y lloré por lo ocurrido….habían cambiado tanto
las cosas y todo por culpa de una tal Victoria una chica que conoció Tayler en
las vacaciones según dice él.
La semana
siguió igual con la diferencia de que no salía de casa después de trabajar,
además de que llevaba sin hablar con mi hermano y mis amigos desde lo ocurrido
con Tayler, no dejan de llamarme pero mi cobardía y miedo me impiden contestar
a sus mensajes, además no quería que me vieran en este estado, aún en mi cuerpo
había moratones y heridas producidas por Tayler, algo que por la mañana
ocultaba bajo toneladas de maquillaje, dejé de visitar a mi padre y me metía de
lleno en mis casos convirtiéndome en una mujer fría y distante, tanto que al
final de este mes fui nombrada mejor abogada del mes, ya que desde entonces no
había perdido ningún caso.
Ya en el mes
de Febrero me salió un caso bastante importante en Alaska y por ello hoy un mes
después estaba en el aeropuerto para coger un avión para ir allí.
Me despedí
de todos de forma rápida y subí al avión, todos seguían sin saber lo que
pasaba, y lo peor de todo es que no sé si podría volver a casa, ya que Tayler
no deja de acosarme desde el día de lo ocurrido en su casa, y varias veces he
terminado en el hospital por su culpa, aunque él no se ha ido de rositas,
gracias a aquel chico rarito de la comisaría de mi padre, que ahora, se había
convertido en mi protector y mejor amigo, Josh el único que sabía lo ocurrido con Tayler
debido a que un día lo pilló golpeándome cuando salí de la radio.
Ya en Alaska
me hospedé en un hotel y mañana visitaría a la familia Stuart, los cuales
necesitaban mi ayuda para hacer el trámite del divorcio de Kate Stuart y Alex Fox,
algo complicado ya que los Coratella eran una familia muy conocida y rica, pero
no me echaría para atrás ese hecho.
Después de
tres meses de duro trabajo y otra vez ganar el caso, volví a Miami, Tessa Stuart
hermana de mi cliente Kate, fue una gran amiga para mí y decidió venir conmigo
a Miami, durante un tiempo se quedaría a vivir en mi casa.
Cuando entré
a mi piso había cartas y notas por todas partes, las notas eran todas de la
misma persona Tayler, por lo que no tardé en tirarlas a la basura y a Tessa se
le ocurrió la idea de irnos de fiesta, después claro está de ver a mi sobrinito
Matt.
Tessa dijo
de visitar un pub o algo así, llamado “La casa de la lujuria” y no pude negarme
a su petición.
-Claire
ponte este vestido, seguro te queda increíble-dijo Tessa mostrándome un vestido
corto con un escote bastante pronunciado de color lila-
-¿No es muy
llamativo Tessa?
-Claire de
eso se trata, tienes un cuerpo increíble y debes aprovecharlo, además ya es
tiempo de que te estrenes-dijo riéndose-
-No digas
tonterías Tessa y vamos-dije-
Salimos de
mi apartamento a las doce y media de la noche dirección a ese pub y cuando ya
estábamos allí, me di cuenta de que no era un pub, sino un local de gigolós,
definitivamente Tessa estaba loca.
-Bienvenidas
guapas-dijo un chico con solo un tanga-seguidme y os llevo a una mesa-dijo
besando nuestros labios-
-Tessa, ¿qué
diablos….?
-Hola chicas
¿qué deseáis tomar o comer?-dijo un camarero también en tanga-
-¿Qué nos
recomiendas guapo?
-Banana con
chocolate caliente, pene con vainilla, esperma con nata o polla con caramelo
-Yo quiero
una banana con chocolate caliente tamaño grande y mi amiga polla con caramelo
tamaño XXL
Yo me quedé
en shock…..
-¿Qué se
supone que me has pedido Tessa?
-Oh no te
preocupes he pedido a nuestros chicos y los productos que le vamos a comer en
su miembro y resto de cuerpo.
-¿Qué?
-Claire solo
disfruta, sí
-Chicas
vuestros pedidos están en las salas tres y cuatro, seguidme.
Tessa me
empujó por un pasillo oscuro y en la puerta que el chico le indicó me empujó
dentro dejándome una cajeta de condones en la mano.
-Disfruta y
gástalos-dijo entrando en la habitación de al lado-
-Buenas
noches-dije avergonzada-
-Buenas…..-dijo
el chico del antifaz, algo parado-
-Esto yo no
sabía nada de esto mi amiga me trajo aquí y….-empecé, pero sus labios
interrumpieron mi charla-
-No necesito
explicaciones, supongo es tu primera vez ¿No?-dijo soplando en mi cuello-
Yo solo
asentí.
-¿Hay algo
que deba saber antes de empezar?-preguntó tocando uno de mis pechos-
Yo sin
apenas darme cuenta gemí.
-Veo que te
gusta y por tus reacciones sé que eres virgen aún, no te preocupes, te prometo
que será la mejor experiencia de tu vida y no la olvidarás nunca-dijo
tumbándome en la cama-
En ese
momento no sabía la razón que ese chico enmascarado tenía.
-Relájate y
abandónate al placer-dijo besando y lamiendo mi cuello-
-Yo….Yo no
sé si esto…-dije sin apenas voz, por las sensaciones que sus roces me proporcionaban-
-Tranquila,
no te dolerá-dijo quitando mi camiseta y dejando a su vista mi sujetador azul
de encaje-
-Ummmm adoró
el azul-dijo mordiendo mis pechos por encima del sujetador-
Ya no
pensaba solo actuaba y todo gracias al inmenso placer que me daban sus
caricias.
Sus manos
bajaron a mis caderas, después a mis muslos hasta que poco a poco sus manos
levantaron mi vestido acariciaron de forma muy sensual mis piernas, caderas y
por encima de mi ropa interior rozo mi sexo, ya humedecido por el placer.
Sus labios
no se separaban de los míos, su lengua inspeccionaba mi boca como una gran
experta, algo no muy raro.
Cuando menos
lo esperé mi vestido desapareció por la gran habitación dejándome expuesta ante
ese chico desconocido en tan solo ropa interior.
Sus labios
pronto besaron cada zona de mi cuerpo descubierto llevándome a un lugar
maravilloso, su lengua lamía mi cuello y lóbulos de forma alternativa, a la vez
que amasaba mis pechos, haciéndome gemir cada vez más, si seguía así pronto me
correría y eso que solo me estaba tocando.
Pronto dejó
de besar y lamer mi cuello para bajar a mi vientre, el cual lamió y mordió,
para después soplar sobre la zona que segundos antes había lamido, haciendo que
mi espalda se arquease por el placer, sus manos rozaron mis pechos y se
perdieron en mis espaldas, para así hacer desaparecer mi molesto sujetador, por
una extraña razón no sentí vergüenza al exponerme de esa forma con un
desconocido sino que me encendió más.
Nada más
liberar mis pechos, su boca los devoró y lamió haciéndome gemir y jadear más
aún, mis braguitas estaban realmente húmedas y sentía en esa zona una calor
cada vez mayor, él lo notó y haciendo aún lado mi ropa interior, acarició mi
clítoris haciéndome gemir más aún, sus dedos lo pellizcaron y acariciaron de
forma fuerte hasta que uno de sus largos y expertos dedos se hundió en mi
interior haciéndome gritar de placer, pronto introdujo otro dedo y aumentó la
velocidad haciendo que mis paredes se estrechasen en ellos, estaba a punto de
correrme y él lo sabía por eso aumentó la velocidad y cuando exploté en su mano
grité de placer como una posesa, era el orgasmo más grande que había tenido en
mi vida.
El chico se
lamió los dedos con mi jugo y me quitó mi última prenda, tomó el bote de
caramelo y me lo extendió por las zonas más sensibles de mi cuerpo, el cuello,
los lóbulos, mis muslos, los pechos y cuando menos lo esperé mi sexo estaba
lleno de nata y caramelo.
Primero
empezó a quitar el caramelo de mi cuello volviéndome loca, después mis lóbulos
y cuando llegó a mis pechos fue cuando tuve mi segundo orgasmo más placentero,
el satisfecho por mis reacciones, decidió seguir por mis muslos, los cuales
lamió y mordió a su antojo faltaba poco para correrme de nuevo cuando con su
dedo me dijo que no, aguanté como pude, y cuando menos lo esperé su lengua
estaba en mi sexo dándome otra vez placer, su lengua pronto penetró mi sexo con
fuerza y minutos después volví a correrme esta vez en su boca.
Era
increíble, ni con el desgraciado de Tayler había tenido tantos orgasmos
seguidos, seguramente es porque este chico se dedica a esto, a darle placer a
las mujeres.
Después de
eso me limpió con una toalla el resto de caramelo y nata que quedaba en mi
cuerpo y fue entonces cuando se quitó su única prenda, dejándome ver, lo bien
dotado que estaba el chico, su pene estaba realmente erecto y nada más verlo me
dieron unas ganas terribles de devorarlo y después meterlo por completo en mi
interior, asique sin pensar mucho al igual que llevaba haciendo desde que entré
aquí, lo tomé del brazo y lo tumbé en la cama, el chico se dejó hacer, cogí la
nata y el caramelo y se lo esparcí por su pecho, muslos y en su gran e hinchado
pene.
Besé sus
labios y después pasé mi lengua por toda la longitud de su pecho, de arriba
hacia abajo una y otra vez, después pasé a sus muslos lo cual le hizo suspirar
y gemir al igual que antes había hecho yo y sin pensarlo más bajé a su miembro
y lo lamí de forma realmente lenta, sus gemidos aumentaron y pronto se iba a
ir, por lo que introduje toda su verga en mi boca mientras mis manos
acariciaban sus testículos y su ano de forma alternativa.
Sus caderas
se movían de forma rápida y yo apreté más su miembro con mi boca, segundos
después se corrió en mi boca, me tomó del brazo y me besó con urgencia, abrí las
piernas y se posicionó entre ellas, me miro a los ojos con ese hermoso antifaz
y entre besos y caricias poco a poco me penetró, no sentí dolor alguno solo
placer y más placer con cada una de sus embestidas, nuestros gemidos y jadeos
eran cada vez mayores y la velocidad de estas cada vez eran más rápidas y
profundas haciendo que nuestros cuerpos sudorosos se escurriesen cada vez que
entraba en mí, estábamos a punto de irnos cuando salió de mí puso mis piernas
en sus hombros y me penetró de forma rápida, me embistió de esa forma tan
placentera y profunda tres veces más y ambos nos fuimos a la vez, había sido
increíble, y como él dijo en un principio lo disfruté al máximo.
Cuando
nuestras respiraciones volvieron más o menos a la normalidad salió de mi interior
a lo que ambos gemimos, se tumbó a mi lado y antes de caer rendidos….
-Ha sido
increíble, gracias-dije abrazándolo y apoyando mi cabeza en su pecho-
Luego nos
dormimos.
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